lunes, 21 de julio de 2008

Es todo lo que se me ocurre decir.

El viento está hecho de violines,,
es todo lo que se me ocurre decir.

Podemos pasar un día tranquilo,
sin muelles ni montañas,
sin marchas ni discotecas mudas en cámara lenta,
sin bicicletas en un video de música electrónica
luces de neón
sin mitología ni novedades.

Quiero que días como hoy la única aventura que vea esté contenida dentro de un televisor
que las camas simbolicen todo menos eroticidad,
quiero que todas las mascotas duerman
que no necesitemos fingir estar enfermos para comportarnos de manera tan inherte.

Quiero que lo único que se mueva en las calles sean motos trayendo comida a mi casa,
quiero que no pase el camión de la basura
quiero que no haya tráfico en lo absoluto, así las ambulancias pueden cruzar en silencio
y nada nada nada me despertará.

Quiero que días como hoy le duela la garganta a todos los pájaros y bichos,
que tengan demasiado frío como para siquiera pensar en salir de sus casas,
quiero que se le acabe la curiosidad al sol y no se atreva traspasar ninguna ventana.

Quiero, en días como hoy, encontrar la maquina de café vacía.
Quiero que se prohiban las ensaladas
quiero que se callen las noticias
quiero que la playa esté vacía
quiero que los ladrones estén resfriados
quiero que se malogren todos los teléfonos

quiero ser sorda
quiero ser una oruga
quiero que la piyama sea mi nueva piel
quiero que todos sepan exactamente a qué me refiero para que, en días como este, sea tanto más fácil conspirar.


1 comentario:

V dijo...

A mí también me gustaria ser una oruga...


Lástima que no...


Que no somos sordos, que no somos oruga y que no escuchamos violines...